El pálido presente del delantero que espera Boca

Ramón Ábila lleva dos partidos seguidos como suplente y sin jugar en Cruzeiro. Y hace más de un mes que no convierte goles.

Ramón Ábila es la carta goleadora que pretende incorporar el presidente Daniel Angelici al Boca campeón de 2017 de cara al próximo gran desafío, la Copa Libertadores del año próximo. Y las negociaciones están avanzadas, pese a que el arribo del ex delantero de Huracán no fue uno de los pedidos del entrenador Guillermo Barros Schelotto. Sucede que Wanchope atraviesa un flojo presente futbolístico en Brasil: este miércoles fue suplente y no jugó un solo minuto por segundo partido consecutivo.

Cruzeiro, su equipo, venció en la 13ª fecha del Brasileirao a Atlético Paranaense por 2-0, como visitante, con el argentino como espectador de lujo. Lo mismo le había sucedido en el encuentro anterior, contra Palmeiras, cuando el conjunto de Belo Horizonte derrotó 3-1 al paulista.

En lo que va del campeonato, Ábila jugó seis partidos como titular (fue reemplazado en cinco de ellos), fue suplente en los siete restantes y de éstos sólo ingresó en cinco. Disputó 537 de los 1170 minutos que lleva jugados Cruzeiro en el torneo, el 46 por ciento.

Con 13 goles anotados, se mantiene como el máximo artillero del equipo en el año, aunque sólo tres de ellos fueron marcados en el Brasileirao, el certamen más exigente. El resto: ocho en el campeonato estadual, uno por Copa Brasil y otro más por la Copa Sudamericana.

Acumula más de un mes sin anotar: los últimos tantos se los hizo a Atlético Goianense en la sexta fecha del Brasileirao, en el estadio Mineirao. Uno con una certera definición mano a mano con el arquero para sellar una buena jugada colectiva; y el restante de penal.

Wanchope perdió confianza del técnico Mano Menezes, quien prefiere a Rafael Sobis como único atacante de área en un esquema 4-2-3-1 que viene utilizando.

Y lo argumentó el entrenador: "Ábila es un gran centrodelantero, pero es un futbolista que precisa que el equipo le lleve la pelota. Cuando eso pase, él va a ser extremadamente útil. Pero él precisa de la pelota para definir. Cuando nuestro equipo no consigue la pelota, porque el rival no nos deja o porque está mejor, yo necesito de un futbolista que retroceda para construir la jugada y llegar al área", analizó el técnico.

Desde que llegó a Cruzeiro, a mediados de 2016, el cordobés jugó 60 partidos y convirtió 25 goles. Es la apuesta de Angelici para el armado del equipo que procurará ganar la Libertadores del año próximo. Tanto es así que el club mineiro analizaba una propuesta formal que llegó desde la Argentina: la cancelación de la deuda que los brasileños tienen con Huracán (1,6 millón de dólares) más la cesión de algunos juveniles (podrían ser Alexis Messidoro, Nazareno Solís y Marcelo Torres).

Fuente del texto: Clarin